El cese fulminante de Teresa Isabel Nnang Avomo como Directora General de Gepetrol, apenas un año y ocho meses después de haber sido nombrada por su “amigo especial”, Antonio Oburu Ondo, Ministro de Hidrocarburos, saca a la luz una red de nepotismo y favoritismo que parece haberse convertido en la norma en las instituciones clave de Guinea Ecuatorial. Desde su llegada a la dirección de Gepetrol, Teresa Nnang Avomo promovió y protegió a sus amigos y familiares como Lucas Nnang en puestos estratégicos.
Uno de los escándalos más notorios de su administración, según ha sabido Diario Rombe, fue facilitar en abril de 2023 la designación de su hermano, Juan Bernardo Nnang Nchama, como Director General de Contenido Nacional en el Ministerio de Hidrocarburos, un cargo de relevancia estratégica. Además de facilitar a su hermano un puesto de poder, lo que desató fuertes críticas y fue calificado como un abuso de poder flagrante. En respuesta, el Vicepresidente Nguema Obiang Mangue ordenó la destitución inmediata tanto de Teresa como de Juan Bernardo Nnang Avomo, en un aparente esfuerzo por limpiar la imagen de la institución.

Esta maniobra, digna de una dinastía en lugar de una administración pública, muestra el grado de corrupción y nepotismo que no solo se tolera, sino que se legitima al más alto nivel en el país. Sin embargo, la medida de «purga» en Gepetrol ha sido recibida con escepticismo. Tras el cese de Teresa Isabel Nnang Avomo, el nuevo Director General designado fue Bienvenido Nguema Envo, miembro también de una familia con profundas conexiones en la élite política del país. Bienvenido es hermano de Buenaventura Nguema Envo con negocios en paraísos fiscales vinculados al sector de los hidrocarburos; ambos son hijos del difunto Marcelino Nguema Onguene y sobrinos de Clemente Nguema Onguene, estrecho aliado del gobierno. Este nuevo nombramiento ha dejado en evidencia que la sustitución de apellidos en los altos cargos podría no ser una verdadera lucha contra el nepotismo, sino una reafirmación del control de la élite gobernante en la empresa estatal.

La situación no es un caso aislado, sino un síntoma de un problema profundamente arraigado en las altas esferas del gobierno. El propio Antonio Oburu Ondo, Ministro de Hidrocarburos, tampoco escapa a las sospechas de nepotismo y corrupción. Tiene un largo historial de emplear su cargo para posicionar a familiares y amigos en puestos clave. En su etapa como Director General de Gepetrol, su entonces esposa, Cándida Okomo Nsue Mensa, hija de una figura cercana al presidente, fue nombrada Directora General Adjunta de Operaciones Petroleras y Proyectos, un cargo estratégico que reforzaba los vínculos familiares y políticos en el sector. A esto se suma el creciente rumor de que Oburu Ondo ha continuado eligiendo su personal en base a lealtades familiares, más que a capacidades o méritos, reflejando un sistema que privilegia el linaje sobre la competencia y la eficiencia.
La cadena de destituciones en Gepetrol y el posterior nombramiento de Bienvenido Nguema Envo ponen en duda la autenticidad de esta supuesta lucha contra el nepotismo. ¿Hasta qué punto están dispuestos los líderes a combatir realmente este flagelo, cuando siguen nombrando en cargos estratégicos a personas de su entorno más íntimo? ¿Realmente se combate el nepotismo en Guinea Ecuatorial? ¿O es que se trata de una campaña de “caza de brujas” selectiva, donde algunos apellidos son sacrificados mientras otros se perpetúan?. La situación de Gepetrol revela una maquinaria política y administrativa diseñada para servir a intereses personales, en lugar de beneficiar al pueblo o al país. El poder sigue concentrado en manos de unas cuantas familias que, lejos de enfrentar consecuencias reales, rotan y reciclan sus privilegios, asegurando que los mismos nombres continúen al mando de la riqueza nacional.
El cese de Teresa Nnang Avomo deja al descubierto una red de corrupción y nepotismo protegida por quienes debieran erradicarla. Mientras no haya una reforma profunda y genuina en el manejo de la administración pública, especialmente en el sector estratégico de hidrocarburos, Guinea Ecuatorial continuará atrapada en el ciclo de abusos y saqueos familiares.
2 Comments
Buenos días.
Respeto su opinión pero es bueno dar la información completa. Usted ha dicho que el nuevo DG de Gepetrol es hermano de tal, hijo de tal y sobrino de tal, pero no he leído por ninguna parte nada sobre él como individuo. No he leído que usted escriba que es un gran profesional que lleva más de 14 años trabajando en Guinea en el sector petrolero en empresa privada, que está muy bien preparado académicamente y que es una persona limpia y honrada. Justo lo que hace falta en el sector público de Guinea. Con un poco de investigación podría haber conocido esta información ya que cualquier persona que le conoce, lo sabe.
La objetividad es el pilar fundamental del periodismo, y cuando se sacrifica por intereses de cualquier tipo, se pierde la esencia misma de su función: ofrecer una visión equilibrada y veraz de los hechos.
Saludos
T.M.
Pides objetividad?. De qué objetividad se puede pedir sobre un hijo de tal, que se formó por ser hijo de tal, y le han ofrecido un puesto de director general de Gepetrol por ser hijo de tal y como todos sus logros, solo por ser hijo de tal y luego pides que le ensalcen más, por ser un hijo de tal?…hazlo tú misma