Compartimos con ustedes este alarmante artículo publicado por el prestigioso periódico americano (NYTIME) el pasado 16 de febrero: Es difícil de imaginar a una autoridad pública con más juguetes que Teodoro Nguema Obiang Mangue, quien ha gastado 300.000 millones de dólares en Ferraris, un jeat gulfstream, una mansión en California e incluso la chaqueta que Michael Jackson utilizó en el videoclip “Thriller”. Esta fiebre de compras es más aun digna de notar desde que este retoño de la familia gobernante de Guinea Ecuatorial, uno de los países más pequeños de África, compró todo esto con un salario oficial de 100.000 dólares al año.
Pero las acciones legales del Departamento de Justicia han llevado el modo derrochador de vida de Teodoro Nguema Obiang Mangue alias Teddy Nguema a su final. Sus 30 millones en propiedades en Malibu se encuentran actualmente en el mercado (probablemente mercado bursátil), al igual manera que sus automóviles de lujo y sus seis estatuas de Michael Jackson de tamaño real. El producto de estas ventas están destinadas a ciudadanos de Guinea Ecuatorial, cuyos fiscales reclaman ser víctimas de la malversación y extorsión del señor Obiang.
Este giro en lo relativo a la fortuna de Nguema Obiang Mangue, es parte de un esfuerzo del gobierno federal (se entiende que el de U.S.A.) que fueron robados por líderes extranjeros, dictadores, políticos y élites gobernantes y que fueron lavados dentro de Estados Unidos. Desde su comienzo en 2010 la Iniciativa para la Recuperación de los Bienes de la Cleptocracia ha crecido para incluir una docena de abogados del gobierno y miembros del F.B.I y la Seguridad Nacional.
“No queremos que los Estados Unidos sean un refugio para este dinero”, sentenció Leslie Caldwell, abogada asistente general y cabeza de la división de casos criminales. “Si esto entra al país, tenemos la habilidad de encontrarlo e interceptarlo. La Cleptocracia daña al campo en el que las leyes funcionan y alimenta el crimen y el terrorismo”.
A pesar de toda esta potencia, el Departamento de Justicia tiene la percepción de que el desarrollo de los hechos en el enfrentamiento de todos estos casos de cleptocracia es desalentadora y la incautación de los bienes relativos a ella, incluso aún más compleja. Un total de 25 casos han sido llevados contra 20 autoridades extranjeras bajo la iniciativa de lucha contra la Cleptocracia y el gobierno busca incautar 1.5 billones de dólares, principalmente en el American Real State y en cuentas bancarias. Pero la mayoria de ese dinero permanece en un limbo legal.
El gobierno está desarrollando esfuerzos para detener el flujo de dinero ilícito dentro de Estados Unidos a través de una estricta política anti lavado de dinero, investigando a compradores de alta gama de bienes raíces y tomando medidas para identificar a los propietarios de empresas fantasmas utilizadas para esconder transacciones financieras.
Los fiscales del Gobierno han tomado como objetivo los fondos que se mantienen por líderes de Nigeria, Ukrania, Uzbekistan, Corea del Sur, Taiwán, Honduras e incluso Canadá. Uno de estos casos involucró 630 millones de dólares alguna vez controlados por el fallecido Sani Abacha, general nigeriano de mano dura, quien dirigió el país en los años 90′ y de quien se reportó haber robado millones de su misma patria.
Otra búsqueda de 250 millones de dólares se debe a los actos de malversación de Pablo Lazarenko, el pasado Primer Ministro ukraniano quien pasó muchos años en prisión en Estados Unidos por cargos de lavado de dinero. Luego, tenemos también a la glamorosa Gulnara Karimova, la hija educada en Harvard del presidente de Uzbekistán, quien se fugó con 300 millones de dólares de un sistema de telecomunicaciones y los depositó en un banco de Estados Unidos.
El objetivo es, algún día, repatriar todos estos bienes a los países donde fueron robados. En su explicación sobre la Iniciativa contra la Cleptocracia, Eric H. Holder Jr., ocupando el cargo de fiscal general, llamó de ‘la más alta prioridad’ y de un gran esfuerzo el ‘frenar la corrupción, detener a los criminales involucrados y proteger los recursos públicos’.
[…]
En Guinea Ecuatorial, el principal testigo contra el señor Obiang permanece en una celda infestada de insectos y sujeto a “torturas incluyendo golpizas y latigazos”, de acuerdo a un reporte de la Open Society y muchas otras organizaciones sin fines de lucro.
[…]
El Departamento de Justicia anunció el caso de Guinea Ecuatorial como una extraña victoria, e incluso esta fue una victoria parcial. El pasado Octubre, el gobierno estableció un arreglo en el cual Teodoro Obiang debe entregar cerca de 30 millones de dólares por la venta de sus bienes en Estados Unidos a una organización de caridad elegida por el gobierno de U.S.A. y la familia Obiang para beneficiar a ciudadanos de Guinea Ecuatorial. Aunque, el acuerdo pactado fue menos de la mitad de los 70 millones de dólares que los fiscales habían solicitado.
Violando una orden de la corte, Nguema Obiang movió a la fuerza parte de sus propiedades y las puso nuevamente a su disposición, incluyendo el famoso guante blanco incrustado en joyas y todos sus álbumes de platino y oro.
Fuente:NYTIME