El Observador: Advertencia exagerada de la Oficina de Información Prensa

El Observador: Advertencia exagerada de la Oficina de Información Prensa

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La advertencia de la Oficina de Información y Prensa del Gobierno a Diario Rombe de que se abstenga de utilizar sin previa autorización su material gráfico, y de acudir a los Tribunales en caso contrario, no es, en realidad, ilógica, en la medida en que se inscribe en el marco del derecho de protección de la propiedad intelectual. Pero sí tiene un claro elemento de exageración, del que se puede deducir incluso una cierta animadversión al Diario. Veamos en qué consiste este.

El siguiente aviso puede encontrarse al final de cada publicación de la Web oficial gubernamental:

“La reproducción total o parcial de este artículo o de las imágenes que lo acompañen debe hacerse, siempre y en todo lugar, con la mención de la fuente de origen de la misma (Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial)”.

Según este aviso, para la reproducción de las publicaciones e imágenes de la referida Web por terceros, basta que estos la mencionen como origen de las mismas, sin necesidad de previa autorización de su parte. El consentimiento del uso de ese material queda establecido así con el solo hecho de indicar que la fuente del mismo es la Oficina de Información y Prensa del Gobierno. Si esta hubiese querido que la autorización fuese un requisito a fin, el precitado aviso se hubiese formulado así:

“La reproducción total o parcial de este artículo o de las imágenes que lo acompañen debe hacerse, siempre y en todo lugar, con la previa autorización de la Dirección General de Base Internet del Ministerio de Información, Prensa y Radio (Oficina de Información y Prensa de Guinea Ecuatorial)”.

Lo que no es el caso. De modo que una hipotética demanda al Diario alegando la no autorización señalada, sería difícilmente sostenible. Pero al Diario le sería desfavorable el no haber citado la fuente al utilizar el material de la Oficina de Información y Prensa del Gobierno, una falta menor.

Y queda la pregunta:

¿Por qué se exige a un Medio de Comunicación concreto el requisito de obtener la autorización antes de usar el material de la Web gubernamental, cuando es suficiente la sola mención de la fuente a este mismo efecto?

El Observador

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