El Presidente del PDGE de Santa Maria 3 se apropia de una instalación de un tanque Cisterna para su familia

La situación es insoportable en Malabo que obligaría a los ciudadanos de Santa Maria 3 convocar una manifestación en los próximos días si el Gobierno de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo no resuelve de una vez la situación.

Diario Rombe ha recibido una llamada urgente por parte de varios ciudadanos quejándose de la actitud ingrata de Gregorio presidente del Consejo de Santa Maria 3 y militante del Partido Democrático de Guinea Ecuatorial. “Este hombre ha convertido en su propiedad la cisterna de tanque de agua construida por la petrolera EGLNG en su programa de obra social para con los ciudadanos de escasos recursos”.

“La cisterna es ahora de su propiedad y solo se benefician de ella su familia y el mismo Presidente quién ha repartido las llaves a cada uno de los miembros de su familia” nos cuenta una mujer de avanzada edad.

Los ciudadanos de Santa Maria 3 no saben dónde acudir para plantear la queja ya que afirman “al Defensor del Pueblo no le interesan estos temas y hablar con él es muy difícil”. La cisterna se abre bajo la autorización del Presidente “si alguien de su casa quiere agua se abre y cuando termina de cargar agua potable se cierra para que el resto de los ciudadanos ajenos a su familia no puedan beneficiarse del agua que en teoría debería ser de todos”.

Diario Rombe ha recomendado a los ciudadanos organizarse y convocar una marcha pacífica para exigir la apertura de la cisterna ya que no es propiedad del Presidente, sino de todos los ciudadanos de la Localidad.

Nos confirman que la cisterna puede suministrar agua potable durante todo el día “hemos recomendado al Presidente que se abra desde las 6.30 de la mañana para que tanto los estudiantes como los trabajadores o cualquier otra persona pueda acceder a ella hasta las 12 del mediodía, más tarde, a las 18 horas, volver a abrirse el pozo”, pero a  Gregorio le da absolutamente igual la opinión del poblado.

Afirma Gregorio con total firmeza que “este pozo pertenece a mi familia. Estoy trabajando duro para el PDGE y por lo tanto tengo todo el derecho del mundo de cerrar esta cisterna para que solo hagan uso de ella quienes  yo permita”. Ahora los ciudadanos se ven obligados a pagar 1000 francos por cabeza para poder obtener un poco de agua.

Los ciudadanos se han organizado para hacer guardia en los alrededores de la cisterna de agua “para que podamos estar pendientes de cuando él decida abrir el pozo y aprovechar cargar agua porque si no, nos morimos de sed”.

Nadie puede enfrentarse a él porque si lo haces entonces no podrás acceder al patio donde está instalada. Es un cachondeo lo que está haciendo el PDGE con su pueblo, un pueblo cansado de las constantes humillaciones, “aunque se abra la cisterna y estemos cargando agua, suele venir y cerrarlo sin avisar previamente a nadie, dejando a muchas familias volver a sus casas con los recipientes vacíos». 

Pero hay momentos en los que a Gregorio le entra ese pequeño sentimiento de compasión, cuando ve a muchas personas aglutinadas suplicando querer cargar un cubo de agua, entonces ordena a un familiar que abra el grifo. Es triste pero es la realidad. El Gobierno de Guinea Ecuatorial no hace nada por resolverlo. Es difícil conseguir agua en Malabo, y cuando una empresa realiza una obra social para que se beneficien todos, no tiene derecho ningún dirigente del PDGE confiscar el bien en beneficio suyo.