El alcalde de Las Torres de Cotillas se pone un sueldo de 54.000 euros
El alcalde de Las Torres de Cotillas, Domingo Coronado, ha dejado de percibir el salario del Servicio Murciano de Salud, salario que desde que es alcalde corría a cargo de todos los murcianos y murcianas. Desde el pasado 15 de junio cobra como alcalde de las arcas municipales y su salario será de 54.000 euros anuales.
En el desarrollo del pleno celebrado a tal efecto, Antonio Peñas, portavoz del grupo municipal socialista, le recriminó que se celebrase dicho pleno pues estábamos a 13 días de la celebración del ordinario mensual, y el coste de dicho pleno ascendía a unos 3.000 euros, un gasto totalmente innecesario ya que solo era cuestión de esperar unos días.
Peñas también destacó la poca generosidad del primer edil a la hora de fijar su nuevo salario, ya que ha recurrido prácticamente al máximo (55.000 euros) que contempla el borrador de la nueva Ley de bases de régimen local para los municipios entre 20.000 y 50.000 habitantes. “Un salario que desde el grupo socialista entendemos desorbitado y que debería haber ido acompañado de una reducción de los honorarios que cobran el resto de concejales liberados del equipo de gobierno del PP, sobre todo tras la reducción de la actividad a mínimos por parte de algunas concejalías”.
El nuevo salario del alcalde –según el PSOE– “contrasta directamente con las dificultades por las que están atravesando los más de 2.600 parados existentes en nuestro municipio y con los grandes problemas que sufren estos días los ciudadanos para hacer frente al pago de la contribución”.
Otra de las grandes decisiones del alcalde Coronado ha consistido en reducir la jornada de prácticamente todos los empleados municipales del Ayuntamiento a cinco horas diarias (25 horas semanales) durante los meses de julio y agosto, aludiendo al alto coste de energía que supone tener abiertas las dependencias municipales. A juicio de los socialistas, “esta decisión está directamente relacionada con la construcción del nuevo Ayuntamiento, una obra vendida a todos los ciudadanos como un ejemplo de modernidad y de eficiencia energética y que se ha convertido en un autentico fiasco lleno de defectos de obra, que hace prácticamente inviable su uso cuando surgen ciertas dificultades climatológicas”.
“La reducción de jornada es una decisión unilateral del propio alcalde” y desde el grupo municipal socialista insisten en dejar claro que “nunca fue planteada por los trabajadores, de los que destacamos su profesionalidad y los importantes esfuerzos económicos a los que han accedido desde la puesta en marcha del plan de ajuste”, concluye el PSOE local.