- Si no recibe sus bienes hará públicas las operaciones bancarias de General Work que demuestran la corrupción del Gobierno
“Esperamos que Guinea Ecuatorial reconozca públicamente nuestra inocencia y nos devuelva todo lo que nos ha quitado material y moralmente”. Esto fue lo que exigió el empresario Fabio Galassi en dos cartas dirigidas al dictador, Teodoro Obiang y a su hijo, Teodoro Nguema el pasado 28 de junio de 2018.

En las misivas, el empresario italiano informó al régimen de Obiang de que tiene muchos documentos de las operaciones “dudosas” que su familia ha hecho a través de la sociedad General Work, “tiene usted una semana de plazo desde la recepción de esta carta por parte de su embajada para responderme satisfactoriamente con la voluntad de devolverme en ese mismo plazo mis bienes o, en su defecto, responderé con todo el poder de la ley que se me confiere”. –lettera-ns-storia-presidentee–
Como bien denuncia Galassi, sus bienes fueron confiscados por altos miembros del Gobierno que a fecha de hoy se resisten a devolverlos, “durante mi detención en mi casa, el ministro delegado Juan Olo y el fiscal general me sacaron del bolsillo los 500.0000 Fcfa que tenía guardados para utilizarlos durante el tiempo que estuviera en la cárcel. También se llevaron relojes y móviles de mucho valor y tres computadoras”. Un documento firmado por el inspector general de la Seguridad Nacional, Marcelo Castro fechado el 21 de marzo del 2015 –DOCUMENTO– contiene una lista detallada de los bienes que le fueron confiscados al director de General Work cuando fue detenido ilegalmente sin ninguna orden judicial. Esas pertenencias son las que, a fecha de hoy, Fabio Galassi exige que le sean devueltas. Asimismo, quiere que los extrabajadores de General Work cobren lo que se les debe en las próximas semanas porque, de no ser así, no dudará en reventar las cloacas de la dictadura haciendo públicas las operaciones financieras que se han realizado durante años.
Por otro lado, Fabio Galassi recuerda a Obiang en su carta que en su estancia en la cárcel ha sido testigo de las sesiones de torturas a las que los militares someten diariamente a los prisioneros sin la posibilidad de comunicarse con sus familias y obligados a limpiar las alcantarillas abiertas de las prisiones. Sin embargo, a pesar de haber sido denunciados, ninguno ha respondido por sus actos y continúan en las mismas prisiones sometiendo a duras torturas a sus propios ciudadanos.
Tras la recepción de las cartas dirigidas al dictador y a su hijo, al ministro del Interior, Clemente Nguema Onguene –lettera-ns-storia-clementeE– y a su hermano, el defensor del pueblo, Marcelino Nguema Onguene –lettera-vicepresidente-v22–el gobierno de Obiang ha optado por mantenerse en silencio. Todos ellos han preferido hacer como si no hubiera pasado nada, confiando en que el empresario italiano nunca cometería el error de hacer público los secretos mejor guardados de la familia y los colaboradores más leales del régimen. Uno de los casos que pretenden ocultar a toda costa es el de la venta de un terreno propiedad de General Work valorado en 15.000 millones de Fcfa que el exmagistrado de la Audiencia Provincial de Malabo, Rubén Clemente Nguema Engonga vendió sin ninguna explicación a Constancia Mangue Nsue Okomo por 400 millones Fcfa.
Condenados injustamente
El empresario italiano Fabio Galassi de 63 años y su hijo, Filipo Galassi de 25, ambos empleados de la sociedad mercantil General Work SL, constituida por dos italianos, Giulio Cistaro y Giuseppe Vona, el 23 de noviembre de 2011 ante el notario de Bata, D. Salvador Ensema Mba fueron condenados sin ninguna prueba mediante sentencia firme a 33 y 21 años de cárcel, respectivamente, por los supuestos delitos de apropiación indebida, estafa, falsificación de documentos, alzamiento de bienes y hurto.
“Hemos pasado tres años en una de las peores prisiones del continente africano, alimentándonos de comida para animales, con militares que humillan y torturan a los prisioneros por cualquier motivo, despreciando el derecho a la dignidad y vida humana que merece toda persona” denuncia Fabio Galassi en el relato que tiene plasmado en un diario al que denomina “Diario de los tres años en la cárcel”, donde recopila todas las vejaciones y torturas que realizaba José Ela Mbiang alias César, al servicio de Obiang Nguema. Aseguran haber visto en la cárcel prisioneros de entre 11 y 12 años compartiendo celdas con adultos por haber robado una simple cerveza, “pero nunca vimos en la cárcel a los verdaderos corruptos de Guinea Ecuatorial” añade “tenemos pruebas documentales de la corrupción existente de miembros del Poder Judicial que nunca han cumplido condena”. Entre ellos, jueces y miembros del Gobierno como Eucario Bacale, Juan Olo Mba Nseng, Clemente Rubén, Eliseo Nvo Mangue, Antonio Ntutumu, Cándido Nsue Nguema, Empresa Akoroliun, Somproge, Guru System, Leoncio Andrés Ondo Esono Madjo, Joaquín Mba Abuy, Marcelino Ntutumu alias Míster 10% y Tadeo Ela Nguema Oyana, entre otros.
Durante los tres años que pasaron en la cárcel pública de Bata, los empresarios usaron la misma vestimenta con la que fueron detenidos, nunca se les dio la oportunidad de hacerse con otra ropa que pudiera reemplazar la que portaron hasta su puesta en libertad. A mediados de este año, los condenados salieron de prisión por cuestiones de salud, una medida que fue manipulada por el vicepresidente de la República, quien la vendió ante los ciudadanos como un acto de clemencia por su parte. No obstante, estas afirmaciones fueron desmentidas por Diario Rombe con la publicación de varios autos del presidente de la Audiencia Provincial, Manuel Ndong Nguema que demostraban lo contrario.
La única versión completamente veraz es que los empresarios fueron puestos en libertad por miedo a que Fabio Galassi falleciera en la cárcel, ya que se encontraba en un delicado estado salud. Además, el dictador Obiang Nguema temió que, de seguir en la cárcel, los empresarios comenzarán a sacar a la luz los turbios negocios de la familia.
Los Galassi fueron acusados de la quiebra de la empresa General Work. Sin embargo, los más de 300 documentos a los que ha tenido acceso Diario Rombe, señalan, tras la auditoría realizada por PricewaterhouseCoopers, que el activo de General Work se sitúa en 84.447.686.637 Fcfa y el pasivo es de 40.931.300.341 Fcfa, siendo la diferencia a favor o saldo acreedor de 43.516.386.296 Fcfa. A tenor de estos datos es imposible hablar de que se haya producido quiebra de la empresa. Un detalle que llama la atención en esta auditoría, y que el empresario denunció ante las autoridades competentes a nivel internacional, es que muchos activos de la empresa no han sido añadidos ni tenidos en cuenta a la hora de realizarla. Las retenciones sobrepasan los 10 mil millones de Fcfa, así lo demuestran los documentos contables que ha analizado este periódico y que se publicarán próximamente para el interés del pueblo, partidos políticos y organizaciones de lucha contra la corrupción. Como es costumbre en el entramado de la corrupción de Guinea Ecuatorial, en varias ocasiones se han realizado ventas de bienes de General Work sin ninguna anotación contable.
Según la primera versión que el empresario Fabio Galassi dio a Diario Rombe en dos reuniones físicas que el director de este medio ha mantenido con el italiano, existen documentos que demuestran claramente “que personas que aún siguen en libertad han cobrado en efectivo muchos miles de Fcfa de la empresa y del Gobierno”. Las pruebas de este hecho han sido facilitadas a este medio de comunicación y en ellas pueden observarse la cantidad ingente de operaciones bancarias realizadas por la entonces tesorera del Estado, Montserrat Afang Ondo y la actual ministra delegada de Economía, hija de Armengol Ondo Nguema y sobrina del dictador, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo.
El italiano Fabio Galassi es clave para conocer con detalle los fondos públicos que la familia del dictador ha llevado desde que el finado Igor fundó la sociedad Rangerbourg Guinea Ecuatorial S.A. Conoce además los esfuerzos que realizó la esposa del mismo, Ana María Moro cuando se hizo con el control del Grupo, reduciendo la deuda de 110 millares hasta 40 millares de Fcfa, intentando además, limpiar la empresa de corruptos, despidiendo a los colaboradores de la anterior dirección que destrozaron y saquearon la empresa -las pruebas contundentes que tiene Diario Rombe lo demuestran. A pesar de todo, esta situación sigue sucediendo hasta la fecha sin ningún control a pesar de haber nombrado mediante auto el 8 de abril del 2015 una comisión gestora compuesta por: Sereno Esono Sima, Clemente Alogo Obiang, Joaquín Mba Abuy, Violeta Ljubisa Vljevic, Florencia Ayetebe Nse Obono y Gabriela Victoria Atogo Nse.
La comisión de gestión, nombrada por un juez y modificada varias veces, ha parado todas las obras de General Work transfiriendo algunas obras a otras empresas como la construcción del Palacio del Gobierno -8 mil millones de Fcfa-; el puente de Oyala -3, 5 mil millones de Fcfa-; o el hospital de Bata -2,5 mil millones de Fcfa-.
Después de la elevada cantidad de ventas de los bienes que integran el patrimonio de General Work que su produjo, Fabio afirma que sólo se destinó un reducido porcentaje -menos del 10%- al pago de sus salarios, y que aún quedan muchos extrabajadores que, hasta la fecha, no han cobrado lo que les corresponde.
Para entender el conflicto de General Work y RangerBourg Corp Guinea Ecuatorial S.A. habría que empezar hablando de RangerBourg Corp Panama constituida el 24 de abril del 2006 y de los dueños del 55% y 45% de las acciones y el papel que juega la empresa Abayak representado por el cuñado del dictador, el paraguayo, Juan Pablo Romero como miembro del Consejo de Administración de General Work. Diario Rombe publicará próximamente todo este entramado que salpica directamente a Obiang, ya que fue su sobrina Montserrat la encargada de realizar las transferencias en beneficio del clan.
El empresario italiano apunta directamente a Eucario Bacale, Juan Olo Mba Nseng, Clemente Rubén, Eliseo Nvo Mangue, Antonio Ntutumu, Cándido Nsue Nguema, Rafael Martínez, Enrique Messienm y Leoncio Andrés Ondo Esono Madjo, entre otros. Hay muchas preguntas que hacer e historias que contar que podrían interesar a las organizaciones dedicadas a lucha contra la corrupción.
Fabio Galassi afirma que los ciudadanos guineanos y oposición deberían preguntarse dónde está el dinero de las retenciones que el Gobierno debe a General Work, dónde han sido contabilizados por IMPEESA y Marcelino Ntutumu alias 10%, los 1000 millones de Fcfa del Palacio de Gobierno y por qué el ministro Eucario Bacale no está detenido. Toda esta información será detallada por Diario Rombe en las próximas publicaciones.