- Fue sustituido por Antonio Nzambi Elonga, servidor de David Nguema Obiang
La Corte Suprema de Justicia de nuevo de luto, tras el fallecimiento el pasado viernes, del que en vida fue Magistrado de la Corte Suprema de Justicia, Antonio María Mba Mifumu, natural de Micomeseng, quien se encontraba en un delicado estado de salud. Fue Presidente del Tribunal de Apelación, ex miembro del Comité de Honor en 2003, cuando el dictador tomaba posesión de su mandato.
Antes de su fallecimiento, fue degradado a la categoría de Consejero de la Corte Suprema de Justicia por el nuevo Presidente del órgano jurisdiccional, David Nguema Obiang y el Ministro Delegado de Justicia, Juan Olo Mba Nseng, con un sueldo de 500.000 Francos Cfras.
Fue sustituido por Antonio Nzambi Elonga, un conocido miembro del PDGE que ha formado parte en representación del Poder Judicial en las diferentes Juntas Electorales. El nuevo Magistrado, Nzambi Elonga, fue uno de los tres fiscales, ,junto a David Nguema Obiang y Serafin Ondo Meye, sin pruebas condenaron solicitaron la pena de muerte y largas condenas de cárcel de varios políticos de la oposición en 2002.
El finado era el hijo del histórico líder del Partido Político UP, Andrés Moisés Mba Ada. Según comentarios del entorno del régimen, Antonio María Mba Mifumu (q.e.d), se unió al régimen por obligación al casarse con Clotilde Afan, natural de Mongomo y muy cercana a la esposa del dictador, Constancia Mangue Nsue Okomo.
Ha servido fielmente a la dictadura, respaldando sus intereses en todos los procesos políticos llevados por los Tribunales de Justicia de Guinea Ecuatorial. Fue considerado por su propia familia según fuentes cercanas a las mismas “como un traídor tras aliarse al dictador”, sin embargo, el régimen le ha dejado morir en la más absoluta pobreza e indigencia total.
A penas un año después de que muriera su esposa en idénticas circunstancias de miseria absoluta, abandonada por su amiga, esposa del dictador, a la que sirvió con devoción y absoluta lealtad durante toda su vida. Los funcionarios de la Corte Suprema de Justicia, recuerdan al final al margen de sus actividades relacionadas con la dictadura, como un gran profesional, persona afable, cortés y amable.