Por temor a las represalias, sanitarios del laboratorio de Baney han utilizado el anonimato para denunciar a través de las redes sociales, la falta de coordinación entre el Ministerio de Sanidad y el Comité Técnico de Respuesta y Vigilancia contra el COVID-19, para afrontar el avance de la pandemia en Guinea Ecuatorial.

Los sanitarios llevarían varios años trabajando en el proyecto Medical Care Development International (MCDI) SANARIA, una organización que gestiona desde Malabo el programa de Control de Paludismo en las Isla de Bioko. Su principal labor, recuerdan en la misiva que ha sido compartida por miles de internautas, “consiste en realizar pruebas para el desarrollo de una vacuna contra el paludismo en Guinea Ecuatorial”.
Ante la emergencia sanitaria que azota el mundo, el Gobierno creó el Comité Técnico de Respuesta y Vigilancia contra el COVID-19 (CTRV), para coordinar la gestión de la información, detección, evaluación y respuesta frente a la pandemia que no hace más que crecer en Guinea Ecuatorial. Por este motivo, los profesionales sanitarios del MCDI se sumaron a otros voluntarios y profesionales del Laboratorio de Baney, para ayudar al Comité que preside Justino Obama Nve, con el fin de contener de manera más eficiente la propagación de este virus en nuestro país.
Es así, que en el marco de urgencia y sensibilidad del panorama actual, los profesionales del Laboratorio de Baney han criticado el exceso de protagonismo del Ministro de Sanidad y Bienestar Social, Salomón Nguema Owono, quien, usurpa las funciones del presidente del Comité Técnico de Respuesta y Vigilancia contra el COVID-19. En opinión de los denunciantes, debería ser el “Comité científico nombrado por el Ministerio de sanidad -cuyo presidente es Justino Obama- quien tome las decisiones del criterio epidemiológico para realizar las pruebas y, ofrecer los resultados al Ministerio de Sanidad, al Gobierno, a la OMS y a la población en general”.
De la misma forma, el “Laboratorio de Investigaciones de Baney” denuncia la precariedad de sus condiciones laborales, acusando que “no disponemos de suficientes kits y el laboratorio necesita más equipos y material diverso”. Las inquietudes de estos sanitarios, surgen desde la falta de medidas de protección que enfrentan en su labor diaria sin los equipos adecuados, pese a que, el Gobierno realizó una inyección financiera de 5000 mil millones de Francos. «Es obligación del Ministro de Estado de Sanidad y Bienestar Social suministrar al laboratorio los equipos adecuados”, recuerdan.
Junto a lo anterior, el equipo de científicos revela una caótica gestión del Ministro de Sanidad, Salomón Owono, frente a la pandemia, una situación que pone en riesgo a los ecuatoguineanos. Cuestionan su liderazgo y no dudan en evidenciar su autoritarismo ante los profesionales que arriesgan sus vidas para contener la expansión del COVID-19 – “no respeta las funciones del Comité, creado y nombrado por él mismo”, ni tampoco -según denuncian en la misma misiva- “muestra ninguna actividad seria en la adquisición del material necesario para hacer frente a esta pandemia”.
El colectivo de sanitarios ruega al Ministro Owono, a través de ese comunicado, que permita al Doctor Justino Obama, Presidente del Comité de Vigilancia, realizar sus funciones.
Desde la creación del Comité –“tarde y mal”, recuerdan-, “el Ministro de Estado de Sanidad no está tomando con seriedad este problema”. Hemos asistido a reuniones interminables, donde el Ministro no ofrece soluciones a los problemas planteados por los profesionales sanitarios, siendo constantes las amenazas y los insultos de su parte, “culpando a los sanitarios y exhibiendo su poder político”, denuncia el equipo.
Para finalizar, los profesionales advierten de la peligrosidad que suponen las constantes injerencias del Ministro en las actividades del Comité Técnico de Respuesta y Vigilancia contra el COVID-19: “Salomón Nguema Owono es un peligro para la salud de todo el pueblo de Guinea Ecuatorial, lo decimos alto y claro”. Y es que ciertamente, el área de salud, desde siempre y ahora mucho más que nunca, requiere de las herramientas de trabajo necesarias para funcionar, ya que, tal como declara el equipo médico, “somos nosotros, de momento, los que estamos en contacto con los pocos casos importados”.
1 Comment
Veamos caballeros… como se le pude exigir a una persona enferma «mentalmente» que reconozca su enfermedad????
La falta de instrucción adecuada obliga a un estúpido y tonto, utilizar el único vocabulario a su alcance.
DEFINITIVAMENTE ESTE PAÍS SE CONVIRTIÓ EN EL ANTRO DE LA ESTUPIDEZ
«et comoedia in sacris imago courtrooms»