No entiendo, en la actualidad, el sentido del «humor» utilizado en estos lares por algunos. Pero, observo como cierta jactancia de qué importante soy, por parte de otros. Esto me recuerda la actitud de los emigrantes españoles al extranjero, a su vuelta a sus pueblos respectivos en vacaciones. 
Alardeaban, alardeaban y volvían a alardear, de lo bien que les iba fuera de España delante de sus paisanos, pobrecitos ellos, envueltos en el paro,la penuria y la falta de todo, la libertad, en primera línea. Como decía mi abuela ante tanta ostentación de bienestar, «eran como pavos hartos de gachas».
Pues bien. Un destacado miembro de la comunidad guineana en el exterior, se asemeja a aquellos pavos y me los recuerda. Y me pregunto, ¿qué sería de este personaje tan jalonado de todo, sin la asistencia, (pongamos ayuda recibida, de diferentes sectores, internos y externos) para exiliarse a lo grande y así haber gozado de oportunidades no ofrecidas a otros compatriotas?.
Sus intervenciones, brillantes en cuanto al análisis de su país, hay que reconocerlas. Sin embargo a otros niveles me parecen carentes de…juzguen los que esto lean como no me gusta señalar sin nombres, me refiero a Abaga Edjang Nchama, Fernando, al cual y en ocasiones tuve la oportunidad de conocer (por teléfono) nunca a nivel personal ya que no debió creer necesario conocerme en persona en sus distintos viajes a Madrid, al menos para agradecer la atención prestada desde REE, en denunciar situaciones por las que atravesó en las que peligraba su seguridad.
Pero, bueno esto es harina de otro costal. Hay un refrán que dice: es de bien nacidos, ser agradecidos, super Abaga Edjang y usted no lo ha sido ni lo es con la diosa Fortuna y «otros», que le dieron la oportunidad de triunfar (y no solo por méritos propios) fuera de su país. Su post, este, ha rebasado mi paciencia y como no soy hipócrita, se lo digo.
Ah, no haga como con Umberto Riochi, al que trató de forma…(me reservo la calificación) y lea lo que escribo. Al fin y al cabo usted sí me debe algo; yo a usted, nada y eso me da una satisfacción y tranquilidad, no sabe cuánta. Usted descalifica al régimen, pues ¡no sabe cuantísimo se parece a la forma de proceder de «ellos»!. Pero usted, va de bueno y sobrao con respecto a sus compatriotas.
La humildad es compañera de la buena gente, usted no la posee. Tengo un olfato especial para detectarlo. Esa retahíla de ideología o posicionamientos políticos, con nombres incluidos, se la podría haber ahorrado. No era necesaria. Tan solo con publicar su foto, ¡nada menos!, que en un restaurante en pleno, Times Square, New York City, (sin corazón, por supuesto) era suficiente. Y mire, yo también he frecuentado esos lugares, pero eso sí; no por el dinero o bienestar derivado a la pertenencia de organizaciones tan obsoletas como la ONU. Yo, dando la cara y enfrentándome a un régimen que ni me iba ni me venía. Usted, optó por la salida más fácil: la huida. salir de su país ¿por?. El, super Fernando que le vaya bien y respete más a los que menos tienen y sí padecen. Con toda consideración, «ciudadano de a pié».
¿Nos conocemos muy bien, super Fernando? Que yo recuerde coincidimos por casualidad en un encuentro organizado por ASODEGUE, sobre Guinea y apenas hablamos. Será por la relación epistolar que mantuvimos durante un período en el que, como señalo, me refería a los artículos que sobre tu país publicabas. Pero acercarte a la radio explícitamente, para saludarme, no. Si todas las afirmaciones que haces son como «nos conocemos muy bien» con añadido de «testigos oculares», pues apaga y vámonos. Lo que he escrito es cierto y lo mantengo. Y si alguien cree que miento…que le aproveche.
Fin de la «diatriba». Lo de «super Fernando» va rntrecomillado. Lo que ocurre es que se me olvidó este detalle. Y sí, te va como anillo al dedo. Con comillas, claro.¡FINNNN!.
Por: Rafi de la Torre (Facebook)
3 Comments
Sinceramente no creemos que el Doctor Samuel Mba Mombe sea, ni de lejos, comunista, marxista-leninista, castrista ni huérfano de Kim II-Sung, aunque parece que vincularle a esta ideología debería entenderse en ese contexto (del Facebook) en clave de humor; o sea, sin intención alguna de ofender. Por esta razón, quizás las críticas a ese aparente humor hayan sido innecesariamente duras, al igual que la reacción de Nguema Emaga Eyui, para empeorar las cosas.
Descartado el carácter comunista de la ideología del Doctor, lo que sí resulta algo insólito es su desaparición tan prolongada en la red. ¿Alguien le ha visto últimamente en algún sitio?
El Observador
Evitemos diatribas que desvian la atencion al verdadero abjetivo de la lucha guineana que es la dictadura y su sistema. Rafi de la Torre y Fernando Aba son dos personalidades respetodas por haber sufrido por la cuestion de la dictatura. En base a este reconocimiento parece pueril que ahora nos traigan un espectaculo en el que se autodestruuen descalifando uno al otro. Entonces que mensaje quieren dar. Que no se estan envejeciendo y ya no entiende la dirreccion de la verdadera la lucha?. La diatriba que tiene sabor a descalificacion da solo pena o significa que las ilustres personalidades se estan envejeciendo y ya no entienden nada.
Señor Enriche, en un conflicto entre dos personas, provocado injustamente por una de ellas, por muy respetable que hubiera sido, es necesario hacer justicia y apoyar expresamente a la parte injustamente atacada. Y es justo que el atacado responda también públicamente y se defienda. En esto que llamas «diatriba» no puedes equipar a la agresora con la víctima. Y es la agresora la que, para hacer más daño, recurre a Rhombe -supongo- para radiar el ataque y buscar complicidades entre los guineanos envidiosos que tienen guardados aalgunos misiles caseros para atacar a la víctima de la atacante. Quien ha levantado el telón y ha escrito el guión de ese espectáculo que mencionas, es la atacante. No sé si al final de la representación esperaba recibir aplausos.Alguno ya ha recibido. Finalmente, las personas, por muy reyess o reinas que se crean, deben hacerse respetar. Los guineanos no estamos obligados a respetar de por vida a quien no se hace respetar. De igual manera que se pierde la vergüenza, se pierde el respeto. Lo que ella ha escrito es una absoluta falta de respeto con efecto «boomerang».