Desde la fecha de su constitución en mayo de 2007, Ceiba Intercontinental ha tenido diferentes administradores que han presidido el Consejo de Administración entre ellos Enrique Mercader Costa, Santiago Nsobeya y Marcelino Owono Edu. Después de Marcelino Owono Edu, le sucedieron en el cargo otros miembros del PDGE. Entre enero de 2016 hasta diciembre de 2022, periodos en los que ordenó auditar la gestión de Ceiba Intercontinental, Marcelino Owono Edu no sólo era el Presidente del Consejo de Administración de los periodos auditados, sino uno de los principales responsables de marcar el rumbo y profesionalidad de la empresa sobre todo para asegurar su sostenibilidad, “debiendo someterlo a una continua supervisión para determinar que funciona según está definido, modificándolo si fuera necesario”.
A finales de 2022, el corrupto hijo del dictador ecuatoguineano, Teodoro Nguema Obiang Mangue inició las investigaciones buscando los responsables de la mala gestión de la compañía aérea nacional como consecuencia de la presunta venta ilegal del avión ATR72-500. A partir de entonces, los auditores de Teodoro Nguema Obiang bajo la dirección del presunto corrupto Juan Aba Elo, descubrieron numerosas irregularidades y deficiencias que concluyeron con la detención de altos cargos del Gobierno de Guinea Ecuatorial y la apertura de supuestos procesos judiciales contra los presuntos imputados.
En el informe final al que ha tenido acceso Diario Rombe, Juan Aba Elo destaca la ausencia de un sistema de control interno formal apropiado y eficiente que pudo haber evitado el libertinaje y la mala gestión de Ceiba Intercontinental. El auditor recuerda que el Consejo de Administración bajo la dirección de Marcelino Owono Edu “era responsable de someterlo a una continua supervisión”. Sin embargo, para el Fiscal General de la República, Anatolio Nzang Nguema Mangue, pide la absolución de Marcelino Owono Edu “el presidente del consejo de administración no tiene responsabilidad alguna”.
El informe de Juan Aba Elo —Diario Rombe ha publicado una investigación sobre sus presuntos 
escándalos de corrupción— ha puesto de manifiesto la nefasta gestión de Marcelino Owono Edu como Presidente del Consejo de Administración de Ceiba Intercontinental y a quién se debería exigir presuntamente responsabilidades, pues durante su mandato, aprobó las cuentas anuales cuestionadas por Teodoro Nguema Obiang Mangue. De acuerdo con el informe, el importe total de las operaciones y pagos realizados y cuya documentación a los que no tuvieron acceso los auditores, las cifran en 5.430 millones de Fcfas de los cuales, 4.400 millones de Fcfas corresponden a varios pagos realizados en efectivo con los ingresos recaudados en las cajas y algunos pagos realizados por banco por importe total de 1.30 millones de Fcfas.
Además de los ingresos que generaba Ceiba Intercontinental, los auditores señalan que la compañía aérea recibió más de 76.247 millones de Fcfa del Tesoro Público para hacer frente a las obligaciones con sus proveedores. Sin embargo, el auditor del hijo del dictador ecuatoguineano no recoge todos los pagos y conceptos correspondientes que la Tesorería del Estado habría a cuenta de Ceiba Intercontinental desde su fundación el 18 de mayo de 2007, una información vital para conocer cómo se gestionó el dinero. El auditor destacó también la inexistencia de un manual de políticas y procedimientos “debidamente formalizados y aprobados por el Consejo de Administración en el que se definía las funciones, atribuciones y diferentes controles a desarrollar por cada departamento”.
La responsabilidad del Consejo de Administración
El artículo 16 del estatuto de Ceiba Intercontinental faculta al Presidente del Consejo de Administración la potestad de ejercer un control permanente sobre la buena gestión de Ceiba. Es un deber inexcusable. También se le confiere la facultad de aprobar los informes de gestión de los directores si fuera el caso y cerrar las cuentas y los estados financieros de sistensis de cada uno de los ejercicios. Ahora bien, si nos ceñimos a lo que dice los estatutos de la empresa pública, Marcelino Owono Edu sería presuntamente el responsable de la gestión de los directores de Ceiba Intercontinental al menos durante los periodos auditados (2016-2022), pues él aprobó las cuentas anuales sin apenas cuestionarlas.
El Consejo de Administración presidido por Marcelino Owono Edu, según los documentos consultados por Diario Rombe, parece que no encontró ninguna anomalía por la que pudiera exigir no sólo la inmediata destitución de los directores durante los periodos auditados, sino también iniciar procesos judiciales. Para ser más exacto, la auditoría de Teodoro Nguema Obiang Mangue se centró en la “disfuncionalidad” de siete ejercicios bajo la dirección de siete directores durante los periodos comprendidos entre enero de 2016 hasta diciembre de 2022. Pero omitieron deliberadamente los periodos anteriores para conocer la gestión de los administradores anteriores.
| Preguntas sin respuestas |
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| 1.- ¿Cuál era el grado de responsabilidad que tenía Marcelino Owono Edu en la gestión de la compañía aérea nacional durante los periodos comprendidos durante los periodos auditados? 2.- ¿Conocía el Consejo de Administración que Ceiba Intercontinental no tenía un procedimiento de elaboración y liquidación presupuestaria adecuada que permita analizar los desvíos de fondos? 3.- ¿Conocía el Consejo de Administración que las adjudicaciones de contratos a proveedores de bienes y servicios se realizaban directamente sin previo proceso de transparencia? 4.-¿Conocía el Consejo de Administración que Ceiba Intercontinental no declaraba ni pagaba los impuestos retenidos en los salarios del personal al menos desde enero de 2016 hasta diciembre de 2022?. 5.-¿Qué es lo que realmente sabía Marcelino Owono Edu?, porque a este paso, nunca sabrá nada. |
Para contestar a estas preguntas, habría que retroceder hasta el 14 de febrero de 2019, fecha en la que se celebró la reunión de la Junta General del Consejo de Administración de Ceiba Intercontinental bajo la presidencia de Marcelino Owono Edu, uno de los cleptócratas más poderosos del distrito de Mongomo que podría enfrentarse a los dos principales hijos de Obiang en la lucha por la sucesión. El Acta del Consejo de Administración fue firmado por el notario de Malabo, Pergentino Angüe Ondo Angüe el 15 de abril de 2020. En el orden del día se debatieron y aprobaron los informes de gestión de los ejercicios de 2018 y 2019, los informes de los censores de cuentas de la filial de PriceWaterhouseCoopers en Guinea Ecuatorial y las cuentas de los ejercicios 2016 y 2017.
Llegados a este punto, cabe preguntarse quiénes eran los directores y administradores que participaron en la Junta General del Consejo de Administración de Ceiba Intercontinental. Además del cleptócrata Marcelino Owono, estuvieron también presentes los entonces administradores, Luciano Esono Bitegue, Leandro Miko Angue, Alfonso Osa Nguema y Francisco Garcia Berniko. El yerno del dictador, Fausto Abeso Fuma estaba representado por el mismísimo Marcelino Owono Edu.
Al menos tres de estos ejercicios (2016, 2017 y 2018) entonces auditados por la filial de PriceWaterhouseCoopers (PwC) en Guinea Ecuatorial, fueron aprobados por la Junta General del Consejo de Administración celebrado el 14 de febrero de 2019 bajo la presidencia de Marcelino Owono Edu. Según los documentos PriceWaterhouseCoopers a los que ha tenido acceso Diario Rombe, el auditor de PwC alertó sobre la situación fiscal de Ceiba Intercontinental al 31 de diciembre de 2016. Según PwC, “las cuentas de impuestos y tasas ya arrastraban una deuda de 9.686 millones de Fcfas pendientes de pago al tesoro público que sumados a las obligaciones del ejercicio 2017, representan una deuda de 15.376 millones de Fcfa al fisco. Recordar que está deuda incluye la seguridad social”.
Durante la susodicha reunión del Consejo de Administración bajo la presidencia de Marcelino Owono Edu, el censor de cuentas PriceWaterHouseCoopers, Douty Fadiga hizo recomendaciones que a juzgar por los hechos, el consejo de administración no hizo caso, entre otras cosas anomalías, un severo incumplimiento de los plazos establecidos por las leyes para el cierre y aprobación de las cuentas anuales, la falta de declaración de impuestos, la inexistencia de libros de registros de títulos por parte de Ceiba Intercontinental. Entre las recomendaciones, destacan la necesidad de reforzar la organización contable y, sobre todo, el registro y la conservación de las piezas contables, la necesidad de justificar sistemáticamente las compras mediante los bonos de encargos, los albaranes de entrega y las facturas y sobre todo la necesidad de analizar sistemáticamente las cuentas de la compañías.
Según el acta de la reunión, el Presidente del Consejo de Administración, Marcelino Owono Edu decidió aprobar las cuentas anuales y la gestión de los ejercicios 2016 y 2017, con las reservas de que, todas las obligaciones fiscales a cuenta del cliente de Ceiba Intercontinental pase a la categoría de pérdidas. Que Ceiba Intercontinental establezca “un pago de todas las obligaciones fiscales a pagar por Ceiba Intercontinental poco a poco, a los proveedores internos (empresas ficticias) y externos, priorizando a los externos”.
